Un colchón antibacterias está concebido para proteger a los pacientes de un hospital, en camas estandarizadas que tienen que articularse en distintas posiciones y ángulos, los colchones se han de adaptar perfectamente si dejar deformaciones, ni arrugas en su funda higiénica.
En Paraquay los hospitales pese a las medidas adoptadas por el gobierno, siguen teniendo problemas de saturación. A pesar de que en marzo de 2020 el virus Covid-19 entro no con demasiada fuerza, se atajó con bastante éxito la pandemia hasta que, a comienzos de este año, empezaron a desbordarse los contagios.
Ante un panorama tan desolador, las medidas de higiene se hacen más presentes en el entorno inmediato del paciente y entre estas medidas están las utilizadas en el propio equipamiento.
El colchón para cama hospitalaria es sin duda un lugar donde puede anidar pequeñísimas bacterias y es precisamente eso lo que hay que evitar para no empeorar la difícil situación que están pasando en muchos de estos hospitales en Paraguay.
Según datos de la agencia EFE, la ocupación de camas es total y está saturada, por no decir la falta de insumos básicos como vías de goteo, colchones y más camas hospitalarias. Es sabido en muchos hospitales que mantienen un presupuesto equilibrado, el mantener unos niveles de higiene y equipamiento, para ello el colchón de cama hospitalaria es uno de los elementos que se tienen en cuenta para conservar un espacio aislado y libre de patógenos.
La funda de un colchón es vital, considerándose como nuestra segunda piel que preserva la cama de humedades y la posible proliferación de bacterias. En este aspecto existirían dos tipos de tejidos para fundas antimicrobianas, las que usan aditivos y aquellos que en sus fibras están tratadas por medio de una ionización que hace más duradero sus efectos.
El colchón de cama hospitalaria más vendido en Europa es el Sanifirex, resistente al fuego; el tejido de su funda es ignífugo y ha sido calificado como CLASE A según el esquema de clasificación Norma UNE-EN 14533 tras los ensayos realizados y descritos según normativa española, europea e internacional UNE-EN-ISO 12952 (evaluación de la propensión a arder de los artículos de cama hospitalaria; se compone de métodos de ensayo para evaluar la facilidad de ignición por un cigarrillo en combustión y la facilidad de ignición por una llama pequeña descubierta. El resultado de CLASE A significa que la muestra pasa el ensayo de facilidad de ignición por un cigarrillo en combustión y también pasa el ensayo de facilidad de ignición por una llama pequeña descubierta).