En un hospital existen muchos riesgos que hay que tener controlados mediante acciones diarias e inspecciones, en materia de higiene y desinfección para evitar contagios, en medidas contraincendios y por otro lado las medidas de seguridad de las personas, pacientes y personal sanitario, ya que en ocasiones se han dado situaciones conflictivas entre familiares y los facultativos, por no decir de hurtos y robos que se han oído en ocasiones. Dentro de un hospital existen un gran número de áreas donde se han de seguir unas pautas muy estrictas.
Protección contra robos e intrusos
Protección contra incendios
Prevención contra riesgos biológicos e infecciones cruzadas
Control de los gases medicinales
Control de los residuos
Seguridad y mantenimiento en las áreas radiológicas
Seguridad e Higiene Laboral
Mantenimiento de la red de refrigeración
- Protección contra robos e intrusos y regulación de las visitas para evitar masificaciones
Uno de los problemas que han de mantener a raya muchos de los hospitales es el control de accesos en sus instalaciones, para ello se contratan vigilantes de seguridad que gestionan el acceso de familiares y demás personas que visitan el hospital por distintas razones, por visitas a un pariente enfermo o para hacerse pruebas. Todas las medidas de seguridad son pocas, incluso mediante cámaras de seguridad se controlan pasillos y plantas, porque siempre hay robos de material y hurtos de efectos personales de pacientes y sus familiares. Los puntos de acceso con mucha afluencia son claves para controlar el paso de visitantes a un centro hospitalario, siendo de especial atención y estrecha vigilancia zonas tales como quirófanos, consultas, salas de cura, laboratorios, zonas de internamiento especiales como pueden de ser de atención psiquiátrica, custodia de detenidos, ingresados en plantas, etc. o también de zonas de administración, servicios como cocinas, lavanderías o vestuarios del personal. Otro problema son las masificaciones que se forman en algunas áreas, sobre todo en maternidad e infantil, siendo perentorio que los visitantes respeten los regímenes de visitas para favorecer el descanso de los propios pacientes.
- Inversión en materia contra incendios en los hospitales
Son muchos los hospitales que están mejorando y optimizando las medidas de seguridad contraincendios, por ello muchos de sus materiales son ignífugos, sobre todo se hace especial atención en las cortinas para separación de camas y los colchones tipo hospitalario entre otros elementos que pueden ser susceptibles de propagación de las llamas en caso de incendio. No obstante cada hospital cuenta con un sistema de seguridad muy activo que detecta en todo momento cualquier conato de incendio, avisadores de infrarrojos, ópticos y otros sistemas de extinción protegen todas las áreas. Pensemos que en un edificio tan alto como un gran hospital un incendio puede provocar graves daños, debido a la gran afluencia de personas y hospitalizados, la movilidad reducida de los pacientes es un factor a tener en cuenta, por eso la extinción de un incendio es clave para que éste no perjudique a los ingresados y demás personas. De forma genérica y muy estandarizada en seguridad pasiva está la que ofrecen los materiales que permanecen fijos permanentemente en el hospital, su propia estructura por ejemplo, (puertas, forjados, ventanas, falsos techos, etc…).
- Protección contra riesgos biológicos e infecciones cruzadas
Ya en otros artículos hemos explicado de los riesgos que pueden tener las personas que trabajan en hospitales y en especial los pacientes ingresados en ellos por infecciones y contagios bacteriológicos. Un tema que no nos cansamos de repetir es la higiene de las manos, no solo en visitantes, también los propios facultativos en el momento en que terminan de tratar a un ingresado. Las manos son una fuente constante de bacterias, contamos con una flora bacteriana que protege a nuestra piel, pero en ocasiones esa flora bacteriana se altera si no está cuidada y puede albergar microorganismos no deseados que pasan de un lado a otro con el contacto entre personas y materiales. Las infecciones nosocomiales son un problema en cualquier centro hospitalario y no es baladí el asunto, todas las medidas de higiene y seguridad preventiva son pocas, desde el control de acceso de personas susceptibles de padecer alguna enfermedad contagiosa que visita a un familiar hasta la higiene de espacios sensibles como son los baños públicos, en este aspecto vamos a introducir en este artículo un nuevo elemento, como son los secamanos industriales para hospitales, son cada vez más usados para evitar el gasto de papel y que los usuarios los tiren al suelo, el secamanos eléctrico seca las manos de manera eficazmente y no deja rastro de microorganismos debido a la temperatura del aire que expulsa. Otra manera de proteger y evitar estos contagios es con la utilización de cortinas para hospitales antibacterianas o el uso de fundas especiales antiácaros en los colchones tipo hospitalario.
- El uso de los gases medicinales en hospitales
El oxigeno como gas medicinal es uno de los más usados en los hospitales y centros de salud para los pacientes que necesitan ser asistidos y ayudados por un déficit en su autonomía respiratoria. El uso de estos gases son muchos y variados, alguno de sus usos los encontramos en estos ejemplos;
Terapia respiratoria (oxígeno, aire)
- Tratamiento en enfermedades pulmonares
Obstructivas graves (mezcla oxígeno-helio)
- Criocirugía (óxido nitroso, dióxido de carbono, nitrógeno)
- Láser (dióxido de carbono)
- Anestesiología (protóxido de nitrógeno)
- Diagnóstico (oxígeno, dióxido de carbono, helio, mezclas)
- Conservación y transporte de órganos, tejidos y células (nitrógeno, helio)
Estos gases han de seguir un protocolo de seguridad, especialmente en el uso del oxígeno, sobre todo el lugar de almacenamiento debe estar bien ventilado, no se pude fumar ni hacer llamas cerca, las válvulas y accesorios deben estar limpias y secas, cuando se manipulan líquido hay que usar guantes y mascarillas para no quemarse.
- La gestión de residuos en los hospitales
Los hospitales generan residuos químicos, farmacéuticos y radioactivos que pueden a llegar a ser peligrosos, para ello precisan un tratamiento especial, pero en muchos hospitales de países aún en desarrollo, todos estos residuos se entremezclan y queman en incineradores de baja tecnología y alto grado de contaminación, o bien a cielo abierto sin ningún tipo de control. Hoy en día se sabe que la incineración de residuos hospitalarios genera grandes cantidades de dioxinas, mercurio y otras sustancias contaminantes.
La correcta separación de los residuos sanitarios es fundamental siendo importante que cada tipo de residuo sea eliminado en su contenedor correspondiente para que en el centro de tratamiento los operarios que los trata no corran el riesgo de accidentes en su manipulación. Dentro de los residuos hospitalarios podemos encontrar tres grupos, el primero corresponde a los sólidos urbanos (colchones tipo hospitalario, papel, vidrio, cartón, plástico, restos de comida, residuos electrónicos como tóners y tubos fluorescentes, entre otros elementos consumibles). Un segundo grupo que pertenece a los residuos biosanitarios que son los que tienen un gran potencial de contagio e infección (vendas, gasas, sondas, guantes, apósitos, goteos, batas desechables, etc…) y un tercer grupo que se ocupa de los residuos biosanitarios espaciales como ( hojas de bisturí y los instrumentos cortantes y punzantes).
- Seguridad y mantenimiento de las salas radiológicas
Es importante que todo el personal esté advertido de los riesgos que pueden derivarse a la exposición de los aparatos radiológicos en los hospitales, para ello se han de identificar las zonas de peligro por exposición, tanto para los visitantes como para los facultativos que manejan estos aparatos. Normalmente el blindaje que se hace de paredes se realiza con plomo, siendo de 2mm el espesor mínimo recomendable para su aislamiento. Cuando los aparatos radiológicos entran en funcionamiento todos sabemos que quien maneja este material ha de salir de la sala para situarse a los mandos y teclados para activarlos desde una sala contigua y que está aislada a la exposición de rayos X, de igual forma al paciente se le protege con una bata de plomo para determinadas zonas de su cuerpo. El peligro de la ionización radiológica puede provocar que las células de nuestro cuerpo muten cuando en algún punto de su cadena de ADN se rompa y al auto-regenerarse no sanen bien derivando en un tumor. Para evitar esto tanto los pacientes, facultativos como las zonas adyacentes han de estar correctamente aisladas. Aunque siempre se filtra cierta radiación se ha de delimitar la zona según su exposición e indicar el tiempo máximo de estancia en esa zona. Para ello se utiliza una señal internacional de radiación en forma de trébol en diferentes colores y dependiendo de la intensidad de dicha radiación.
- Higiene y seguridad preventiva en riesgos laborales hospitalarios
En cualquier hospital se han de seguir una normas básicas en cuanto a prevención de riesgos laborales, especialmente sus trabajadores, los cuales deben usar una ropa y calzado adecuado, pero sobre todo se han de asegurar determinadas infraestructuras que puedan ser fuente de peligros, por ejemplo el mantenimiento limpio y seco del pavimento para evitar caídas, revisar la sujeción de barandillas para evitar que se descuelguen de sus anclajes. Tomar las precauciones necesarias para no provocar choques causados por un mal uso de pasillos o ascensores cuando se van con camillas o sillas de ruedas. En cuanto a los riesgos de atrapamiento, los ascensores son los más vigilados pues en ocasiones se han dado situaciones de riesgo importantes, de ahí su exhaustivo mantenimiento. Este riesgo puede generarse en centros sanitarios y hospitales al manipular instrumental clínico y otros elementos cortantes o punzantes. Así por ejemplo, el uso de material quirúrgico, y el uso de jeringas puede ser origen de accidentes por punción durante las tareas de extracción, transvase o inyección. Para prevenir los riesgos derivados por el instrumental médico se ha de seguir una estricta limpieza, esterilización y conservación siguiendo los protocolos establecidos. En seguridad preventiva es el control sobre incendios en donde más se incide, sobre todo se está implementando nuevos recursos en materiales ignífugos, como son los colchones tipo hospitalario o las cortinas para hospitales ignífugas y antibacterianas.
- Mantenimiento de la red de refrigeración de un hospital
Las torres y maquinaria de refrigeración de los hospitales pueden causar serios brotes de ligionela en pacientes y personal sanitario si no está vigilado e higienizado periódicamente. Esto es debido a que en ocasiones, instalaciones mal diseñadas, sin mantenimiento o con un mantenimiento inadecuado propician el estancamiento del agua y la acumulación de nutrientes de la bacteria (lodos, materia orgánica, material de corrosión y amebas) formado una biocapa, la cual junto a una temperatura propicia y ausencia de desinfectantes favorecen la multiplicación de la bacteria en las mismas.