Vivir una situación difícil en un hospital requiere de medidas lo más planificadas posibles, incendios, robos, epidemias, inundaciones, reformas, son circunstancias coyunturales que pueden poner en jaque un entorno sensible como un hospital donde hay personas enfermas y requieren de una seguridad y unos protocolos muy exigentes. Los protocolos para prevenir situaciones extremas o complicadas son importantes y sobre todo hay que tener bien definidas las acciones y quienes han de dirigir mediante una cadena de mando todas las decisiones que impliquen las soluciones a cada problema y en cada momento.
¿Qué problemas o contingencias graves podemos encontrarnos en un hospital?
Sin duda la circunstancia que menos deseamos dentro de un hospital es un incendio, para ello los protocolos de actuación aconsejan que si detectamos uno actuemos con calma pero con decisión, sin dejar llevarnos por el pánico buscaremos el interruptor más próximo para activar la alarma de incendios. Dentro de un hospital existen materiales textiles como la ropa de cama que por lo general no son ignífugos, aunque sí tenemos que destacar que el colchón de una cama de hospital suele tener componentes retardantes a la llama, lo cual asegura la no propagación de las llamas.
Aún así las sábanas y bajeras de una cama no tienen este tratamiento por lo que en caso de incendio puede provocar humos. En estos casos se aconseja ir agachados evitando respirar el humo tapándose las vías respiratorias con un trapo mojado al ser posible. Uno de los protocolos que siempre se aconsejan en caso de incendio es la de si estamos atrapados en una habitación y el fuego está al otro lado, taparemos las rendijas de las puertas con trapos o toallas húmedas para que el humo no acceda a nuestra área. Si tenemos a mano un extintor lo usaremos dirigiendo la boquilla de la manguera hacia la base de las llamas realizando un barrido de izquierda a derecha. Normalmente los extintores que encontraremos en un hospital son de polvo químico seco y pueden ser de diferentes tamaños y capacidades, incluso encontrarnos hasta un extintor de tamaño industrial de grandes dimensiones que llevan incorporado un carrito con ruedas para desplazarlo con facilidad.
Paralelamente y junto a los incendios tenemos los protocolos que actúan para prevenir posibles contagios y epidemias dentro de un hospital, pues si éstas se propagan pueden llegar a ser letales. No es una cuestión baladí y son muchas las ocasiones en las que hemos hablado de la higiene en nuestro blog, sobre todo haciendo incidencia en el aseo que hacemos de las manos. Tanto facultativos, pacientes y visitas han de extremar siempre el cuidado e higiene de las manos para no transmitir posibles bacterias de un lugar a otro. No obstante y teniendo en cuenta que pueden establecerse determinados recursos materiales como elementos disuasorios frente a bacterias y otros microorganismos, sea un colchón para hospital con funda antibacteriana o una cortina de hospital antimicrobiana, son una forma adicional de combatir la transmisión de enfermedades nosocomiales en un hospital, pero siempre la prioridad es la adecuada higiene y limpieza de todas las áreas aledañas a un paciente.
En un segundo orden de prioridades están los robos, la seguridad en datos, protección del personal sanitario, control de accesos, siendo en estas áreas los protocolos menos invasivos que los previstos en casos de incendios o posibles epidemias. En cualquier caso en todo hospital ha de haber un equipo de coordinación frente a una emergencia global sanitaria, ya sea causada por un motivo interno o externo. Una seguridad global hospitalaria que se apoya en las nuevas tecnologías, ya que las necesidades de las instalaciones hospitalarias han cambiado para adaptarse a las nuevas normativas. Los directores de seguridad han de planificar las rotaciones necesarias para que todo el personal sanitario conozca todos los protocolos de seguridad en cualquier área.